Las infecciones de orina son más comunes que las sufran las mujeres, debido a que la uretra es más corta y está más cerca del recto. Por lo tanto, facilita la entrada de bacterias a las vías urinarias. Un 50% de las mujeres a lo largo de su vida padecerá infecciones urinarias y el 25% volverá a experimentar una infección de orina recurrente, la mayoría son causadas por una bacteria que seguro conoces, Escherichia coli (E.coli). En épocas del año como el verano, los factores como los cambios de temperatura entre el agua de baño y el exterior, mayor sudoración, la arena y la humedad de los bañadores favorecen el crecimiento de microorganismos y bacterias, lo cual afecta zonas como el vientre y la zona vaginal.
Tipos de infecciones urinarias. ¿Cuáles son las más recurrentes?
Cistitis
Es una infección urinaria que afecta a la vejiga y es la más frecuente del aparato urinario y de todo el organismo después de las respiratorias. En una situación normal, pueden desaparecer al cabo de 24 o 48 horas después de haber empezado el tratamiento.
Síntomas de la cistitis
- Necesidad intensa y constante de orinar.
- Sensación de dolor y ardor al orinar.
- Orinar frecuentemente pequeñas cantidades.
- Sangre en la orina.
- Orina turbia y olor fuerte.
- Molestias pélvicas.
- Sensación de presión en el área inferior del vientre.
- Fiebre leve
Uretritis
Es la inflamación, hinchazón e irritación, de la uretra, el conducto que transporta orina desde el cuerpo. Puede estar causada por bacterias o virus.
Síntomas de la uretritis
En mujeres:
- Dolor abdominal.
- Dolor urente al orinar.
- Fiebre y escalofríos.
- Dolor pélvico.
- Flujo vaginal.
- Dolor en las relaciones sexuales.
En hombres:
- Sangre en la orina o semen.
- Dolor urente al orinar.
- Secreción del pene.
- Micción frecuente o urgente.
- Sensibilidad, picazón o inflamación del pene.
- Inflamación de ganglios linfáticos en la zona de la ingle.
- Dolor durante la relación sexual o eyaculación.
¿Con qué frecuencia una infección de orina se considera crónica?
Una infección urinaria es considerada crónica cuando la infección permanece en el tiempo o reaparece con frecuencia, cuando la infección aparece todos los meses, a pesar de haberse tratado con antibiótico correctamente instaurado. Cuando la infección se convierte en crónica, por lo general, suele ser debido a un mal vaciamiento vesical, por la existencia de cálculos renales o de residuos tras la micción, entre otros.
¿Qué puede causar infecciones urinarias recurrentes?
- Relaciones sexuales frecuentes: suele ocasionar tener más infecciones urinarias, ya que el masaje uretral, favorecido en el coito, puede facilitar la ascensión de bacterias hasta la vejiga. Las mujeres sexualmente activas serán más propensas a sufrir de infecciones urinarias.
- Tipos de anticonceptivos: el uso de diafragmas vaginales como anticonceptivo puede aumentar el riesgo de presentar este tipo de infecciones.
- Cambios hormonales: el embarazo, el parto, el puerperio, la menopausia o el envejecimiento son distintas etapas que viven las mujeres, es decir, hay un continuo cambio hormonal en todas ellas. En cualquiera de estas etapas pueden aparecer infecciones debido a las alteraciones en el pH vaginal.
- Menopausia: en esta etapa de la mujer puede haber más predisposición a que aparezcan más infecciones, a causa de la incontinencia urinaria, la atrofia vaginal, la diabetes, la cirugía ginecológica previa y la presencia de prolapso de órganos pélvico como el cistocele o vejiga caída.
- Factores genéticos: es habitual que una mujer con infección urinaria repetida, su madre las haya padecido con mucha frecuencia. Hoy se conoce que las personas con el grupo sanguíneo B (grupo B y AB) tienen mayor susceptibilidad a las infecciones urinarias por enterobacterias gram negativas, como lo es E. coli, más que aquellas otras mujeres de grupos sanguíneos A y O.
- Estados de salud comprometidos: la diabetes, insuficiencia renal crónica, estados de inmunodepresión, tratamientos con quimioterapia o radioterapia pueden favorecer las infecciones de repetición.
- Tratamientos antibióticos inadecuados: cuando te encuentras en una situación de tratamiento antibiótico inadecuado puede favorecer la aparición de alguna infección de orina recurrente, debido a la alteración de la microbiota vaginal e intestinal.
Consejos para prevenir las infecciones urinarias
- Hidratación: beber mucha agua ayudará a diluir la orina, por lo tanto, hará que se vaya al baño con más frecuencia, lo que permitirá expulsar las bacterias de las vías urinarias antes de que pueda aparecer cualquier infección.
- Evitar ropa interior ajustada: la zona íntima necesita tener una transpiración adecuada, porque ayudará a evitar infecciones. Así que, será mejor usar ropa interior holgada y de tejidos transpirables, como puede ser el algodón.
- Zona íntima seca: después de la playa o la piscina lo más adecuado será mantener la zona vaginal lo más seca posible, evitando llevar el bañador mojado durante muchas horas, ya que es el escenario perfecto para que las bacterias causen infecciones. Por lo tanto, lo mejor será cambiarse de ropa después del baño.
- Jabones neutros para la zona íntima: se deberá elegir un buen jabón para la zona íntima, ya que aquellos perfumados pueden irritar la zona sensible, aumentando el riesgo de que aparezcan las bacterias.
- Ir al baño antes y después de relaciones sexuales: es muy importante orinar una vez finalizado el acto sexual, ya que reduce la posibilidad de que bacterias queden alojadas en las proximidades de la uretra.
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